lunes, 21 de julio de 2025

monotonía

Cada día, ella servía el desayuno en punto de las 7:00.
Salían a sus trabajos, cada uno en su auto.

Al regresar, ella limpiaba en silencio, se sentaba frente al televisor apagado y esperaba.
Él llegaba a las 6:00, colgaba su saco, cenaba en silencio, se acostaba.

Una noche, él llegó, colgó su saco… y ella ya no estaba.
 Sólo había una nota:
 "Gracias por no notar que llevo muerta desde el viernes".


Twitter: Owiruame

No hay comentarios. :

Publicar un comentario

Agradezco tu visita y comentarios!