lunes, 23 de diciembre de 2024

voraz

(inspirado en unas líneas de JVC en el diccionebrio)

Masticaré tu carne hasta los huesos,  
como perro callejero que encuentra su presa 
en el polvo de una ciudad rota,  
bajo el sol que nunca se apaga.

Mis dientes, rabiosos,  
buscando el último aliento,  
en cada curva de tu cuerpo,  
como si amor e ira fueran una misma cosa  
y no tuviera más remedio que devorarte  
antes de que me devoren a mí.

Beberé entre tus piernas la lujuria del infierno,  
fuego que no deja cenizas, ni esperanza,
sin promesas, sin perdón,  
un infierno sin salvación.

Mi lengua será la espada que raspa  
el alma de todos esos dioses  
que inventamos para darnos fe,  
como si hubiera algo más allá  
de este deseo insaciable de sentirnos vivos.

Porque en tu cuerpo,  
las lágrimas son sal que alimenta la tierra,  
y tus besos, la comunión  
que se traga todo,  
sin dejar rastro.  
Y tú, que vienes a darme la eternidad,  
te quedarás entre mis venas  
como la última copa,  
pero yo no rogaré que pase de mí.

Y si alguna vez, al final,  
me arrastras hasta el suelo,  
te diré que no me arrepiento:  
masticaré tus huesos,  
beberé tu veneno  
y esperaré el fin  
como quien espera el último trago  
de tequila,  
sabiendo que lo peor de la vida  
siempre sabe mejor  
cuando se acaba.


Twitter: Owiruame

No hay comentarios. :

Publicar un comentario

Agradezco tu visita y comentarios!